Ofrecemos una intervención individualizada y adaptada a cada caso, en el que el profesional colabora conjuntamente con la familia para dar una respuesta adecuada a sus necesidades y preocupaciones, utilizando el Modelo Centrado en la Familia.
Utilizamos dicho modelo, porque…
- Se centra en las fortalezas y recursos que toda familia tiene y que puede usar para lograr sus propios objetivos.
- Se potencia la práctica de los aprendizajes en sus contextos naturales (casa, parque, supermercado, colegio, etc.), permitiendo la generalización de las habilidades adquiridas.
- Se adapta mucho mejor a la forma en la que las personas con TEA tienen para aprender, evitando el aprendizaje por “ensayo y error” y las dificultades a la hora de transferir las competencias aprendidas en un ambiente descontextualizado, como puede ser un gabinete privado.
- La familia es la mayor impulsora del desarrollo de sus hijos, son los que más los conocen y es en casa donde se producen las mayores oportunidades de aprendizaje.
Como vemos en la siguiente imagen, con el modelo de experto, una hora de intervención directa con el niño ofrece únicamente una hora de oportunidades de aprendizaje semanal, mientras que si capacitamos a los adultos con el Modelo Centrado en la Familia durante esa misma hora, ésta será capaz de ofrecerle al niño mayores oportunidades de aprendizaje.
Esta intervención está dirigida a fomentar el desarrollo integral del niño:
Habilidades en el desarrollo del niño
Autonomía 
Alimentación 
Interacción con iguales 
Juego individual 
Juego simbólico 
Salidas
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